«Por favor, imagine un gráfico con números desde el 0 hasta el 10. El 10 representa la mejor vida posible para usted y el 0 representa la peor vida posible para usted. ¿En qué lugar del gráfico se situaría usted en este momento?»
Con esta pregunta, realizada cada año a unas 1.000 personas en 150 países diferentes, comienza a elaborar la Organización de las Naciones Unidas (ONU) su Informe sobre la felicidad mundial cada año. Este documento evalúa el grado de felicidad de cada país, así como las variaciones año tras año.
En el ranking de 2017, a la cabeza de la lista de países «más felices» se encuentra, por primera vez, Noruega. El país nórdico lidera la lista, aunque el propio informe destaca que las diferencias entre los cuatro primeros (Noruega, Dinamarca, Islandia y Suiza) es tan pequeña que se podría considerar «estadísticamente insignificante».
Además de la pregunta inicial, los creadores del informe evalúan seis variables clave, en base a las cuales se redondean los valores dados por los ciudadanos de cada territorio: renta per cápita, apoyo social del Gobierno, esperanza de vida, libertad social, generosidad y falta de corrupción.
Con estos parámetros, y teniendo en cuenta los valores obtenidos en años anteriores, se calcula una especie de «valor de la felicidad». En este caso, Noruega sumaría un total de 7.537 puntos, respecto a los 7.522 de Dinamarca (país más feliz del año 2016) y a los 7.504 de Islandia, que cerraría el podio.
España estaría situada en la posición 34 del ranking, mientras que la República Centroafricana sería la nación más infeliz (o «miserable», acepción que recoge el propio estudio), cerrando la lista de los 155 países encuestados por los creadores del documento.
MAYORES CAMBIOS
Sin embargo, si se evalúan las variaciones de felicidad en los últimos 10 años, el informe arroja que España es el 14º país que más infelicidad ha ganado en la última década, junto a países de su entorno como Italia o Grecia, tres de las naciones que fueron golpeadas más duramente por la crisis. Por su parte, el país que peores cambios a sufrido en cuanto a la felicidad de sus ciudadanos en el último decenio es Venezuela.
En el otro lado del espectro, los nicaragüenses son los ciudadanos del mundo que más han mejorado su grado de felicidad en los últimos 10 años según el documento, junto a otros países como Ecuador, Sierra Leona y regiones de Europa del Este (Letonia, Bulgaria, Rusia o Moldavia).